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Fernando de Pedrosa y Meneses, un salmantino en el Rosario

portada

Fernando de Pedrosa y Meneses es, con Mutis, el único catedrático en el Aula Máxima, dedicada a los rectores[1]. Con Mutis comparte asimismo el origen peninsular. El Dr. Pedrosa venía nombrado para racionero de la Catedral, aunque no se había ordenado todavía. 

 

Detalle del retrato del Dr. Pedrosa.

Salmantino de nacimiento, fue hijo del médico portugués Luís Rodrigues Pedrosa, catedrático salmantino[2]. Graduado en Cánones en dicha universidad, ocupó la cátedra correspondiente. Cuando vino a Santafé, aparecía en la Península su obra Repetita praelectio sive facilis et brevis expositio ad titulum Pandectarum de diversis regulis iuris antiqui etc. [Prelección repetida o exposición fácil y breve del título de las Pandectas sobre diversas reglas del derecho antiguo... Salamanca, 1665]. En el Archivo Histórico existe su Academica expositio ad egregios, celeberrimosque titulos de diversis iuris antiqui ex corpore digestorum et de regulis iuris ex libro sexto Decretalium [Exposición académica de los destacados y celebérrimos títulos sobre diversas materias de Derecho antiguo del Corpus de los Digestos y sobre reglas de Derecho del libro sexto de las Decretales... Salamanca, 1664].
 

De la hoja de vida del autor, destacamos que fue presentado
a una prebenda en la Iglesia Metropolitana de Santafé.

 

 

Su salida de Salamanca es anecdótica: su sordera le impedía el ejercicio de la cátedra. Así que pasó a América como racionero y, en 1674, se le nombra provisor. Parece que hubo pleito por la discapacidad del ilustre jurista. En todo caso, el rey ordenó remplazarlo porque “está muy falto de oído”. El arzobispo Arguinao no era muy diligente en aplicar la voluntad real, menos cuando los vecinos se pronunciaron en favor del afectado, representando que apenas era “tardo y dificultoso en el oír”, lo que no le había impedido ejercer de abogado en la Real Audiencia ni... ocupar la cátedra de Cánones en el Rosario, hasta su muerte en 24 de marzo de 1680.

 

*La curiosa historia del Dr. Pedrosa está en la obra del padre Juan Manuel Pacheco, Historia extensa de Colombia. Volumen XIII. Historia eclesiástica. Tomo 2. La consolidación de la Iglesia. Siglo XVII. Bogotá: Lerner, 1975. En lo básico de la biografía coincide Hernández de Alba, Crónica del colegio del Rosario.

 

[1] Incluso uno que no se posesionó, el Dr. Araque.

[2] Natural de Lisboa, leyó Artes y Medicina desde 1620; luego, en la Universidad del Tormes, obtuvo la de prima de Medicina. Rodríguez, L., Rodríguez, J. (2008). La Universidad contemporánea. Miscelánea Alfonso IX. Ediciones Universidad de Salamanca.